martes, 11 de septiembre de 2012

Dicen que...


Al mal tiempo buena cara, que después de la tormenta siempre llega la calma. Que todo lo que sube baja, pero que cuando todo sube lo único que baja es la ropa interior. Que agua pasada no mueve molinos, o sí. Y que todo el mundo merece segundas oportunidades, pero también, que segundas partes nunca han sido buenas. Que quien tiene boca se equivoca y que rectificar es de sabios. Que querer es poder y hace más quien quiere que quien puede; pero que quien todo lo quiere todo lo pierde y además, que de donde no hay, no se puede sacar. También dicen que quien no arriesga no gana, y por tanto, quien la sigue, la consigue.
Que no por mucho madrugar amanece más temprano, pero que a quien madruga, Dios le ayuda.
Y si te pica, te rascas. Todo lo que escuece, cura. No hay más ciego que quien no quiere ver y a palabras necias, oídos sordos; y es que a buen entendedor, pocas palabras bastan. Que la confianza da asco. Que quien no corre vuela y que ya se sabe que las apariencias engañan, y por supuesto, no es oro todo lo que reluce. Que quien no avisa no es traidor, que si te he visto ni me acuerdo, que a rey muerto, rey puesto. Y, que más vale sola que mal acompañada.

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